Crítica de: Ester M González
Puntuación 9 sobre 10
En la obra de teatro Pájaru el clown Pere Hosta se transforma en un pájaro australiano llamado Bower Bird, y nos relata el ritual del apareamiento esta curiosa ave. Las referencias ornitológicas, estudiadamente estrafalarias, se transformarán, en una mirada a ese “pájaro”, que todos llevamos dentro: instintivo, primario, muchas veces ilógico y otras onírico, que pocos se atreven a dejar volar.
La iluminación, los efectos audiovisuales y sonoros, ayudan a su vez, a crear una atmósfera de sugerente irrealidad. El vestuario, estrambótico, (como no podría ser de otra manera en un payaso), colabora activamente con el espectáculo.
Pájaru alza el vuelo de manera surrealista e ingenua, en La Seca Espai Brossa para hacernos reír sin remisión.
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