Valoración: 6 sobre 10
Llega al Teatre del Raval una obra que mezcla el misterio con el humor: Un encuentro sobrenatural. Escrita por Joaquim Bundó y dirigida por Joan Olivé, este espectáculo está protagonizado por Roger Pera, Andrea Montero, Quim Casas y José Manuel Serrano .
Es una comedia con toques de suspense que nos presenta a Jorge, un hombre sumido en una depresión por la muerte de su hermano y que reúne a las personas más importantes de su vida para una extraña cena: su exmujer, su primo y su psiquiatra.
Un encuentro sobrenatural, una comedia con suspense llega al Teatre del Raval
El planteamiento de Un encuentro sobrenatural está muy bien presentado: una reunión cargada de misterio entre personas que, al parecer, no se llevan nada bien. Pero este encuentro tiene un motivo y, a lo largo de la obra, lo iremos descubriendo.
Debo puntualizar que la trama de esta obra teatral está muy bien realizada: tiene giros sorprendentes, se van descubriendo secretos y misterios a lo largo de la obra y esto hace que el ritmo se mantenga de forma estable. Además, la trama es totalmente inesperada y, mediante el humor y la exageración, se consigue una obra que resulta original.
El problema de Un encuentro sobrenatural es que los personajes están cargados de clichés. Demasiado. El gay loca que va con una bufanda rosa, la mujer que es tratada como si fuera una víbora, el chico que parece tonto… Hay algunas frases y algunos momentos de humor que chirrían muchísimo. Un humor demasiado visto y oído.
Considero que en Un encuentro sobrenatural hay una buena idea de fondo, una historia sorprendente y diferente en la que se usan los recursos del misterio y del humor para contarnos algo de forma original. Sin embargo, los personajes fallan. No te los crees, no acabas de entender la psicología de los personajes, por qué actúan así. Se ha hecho una caricatura de los personajes y, al final, pierden verdad.
No obstante, creo que Un encuentro sobrenatural es una obra que puede hacer reír en determinados momentos y que tiene una buena idea de base. Pero a mí, personalmente, no me acabó de convencer.