Crítica de Ester M González
Nota: 5 sobre 10
Una obra de teatro con Toni Lluís-Reyes es lo que se nos presenta con Neu Fosa
Una situación de aislamiento, da mucho de sí desde un punto de vista dramático, y eso es lo que nos viene a narrar Toni-Lluís Reyes en esta obra de teatro de Barcelona que podemos ver actualmente en La Seca-Espai Brossa.
Neu Fosa nos traslada a la Mallorca natal del creador, una isla si cabe todavía más aislada, cuando se ha producido un temporal de nieve inédito en la zona. Un matrimonio mayor queda totalmente aislado del mundo en su propia casa, sin luz y sin apenas poder enterarse de lo que pasa en el exterior, de no ser por un viejo transistor que funciona con pilas. De pronto, reciben la visita inesperada de un joven, que dice que se ha quedado bloqueado en la carretera, con su vehículo inutilizado por la nieve.
El drama surge, cuando se desvelan los secretos que esconden el matrimonio y el que guarda el joven recién llegado. Ambos tienen un pasado oscuro en común, que será desvelado finalmente. El matrimonio tiene un hijo a su cargo que se encuentra en coma debido a un accidente que sufrió de joven. Y el joven recién llegado va a dar una nueva luz al infortunado accidente, aportando nuevos datos, que los padres ignoran.
La obra de teatro Neu Fosa nos pareció un tanto densa y farragosa, sobre todo en la primera parte, antes de que hiciera aparición el joven protagonista. Añadido a la dificultad del acento mallorquín, al que no estamos acostumbrados, pero que celebramos en obras como Acorar, aquí la dicción no fue tan fluida por parte de los dos protagonistas que hacían de ancianos. Nos costó bastante entenderlos, aunque pasaron un buen rato hablando de temas irrelevantes como el tiempo, y otros temas domésticos. Eva Barceló sí nos gustó en el papel de anciana y aunque la obra no llegó a emocionarnos, ella es la clave que rompe el clima tenso entre los dos protagonistas masculinos.
En cuanto a la escenografía, destaca un decorado austero y casi áspero, formado con unos palets de obra, que simulan el interior una casa de pueblo, con su chimenea incluida.
La Mallorca más profunda, la más ajena a extranjeros y modas, y por ende la más tradicional, es la que sale a relucir: los ancianos protagonistas, afirman que hubieran querido un futuro normal para su hijo en coma: que estudiara, que se casara que tuviera hijos; la que el joven protagonista lleva como recién casado y padre de un niño. En esa normalidad truncada por un accidente, se mueven los designios de los protagonistas de Neu Fosa y a esa normalidad se vuelve cuando finaliza la obra. Todo queda de nuevo en perfecto orden. Todo cuadra y se enmarca en ese sistema patriarcal cerrado, que se manifiesta a la defensiva, y de manera agresiva, y se salpica ligeramente, como no, de algo de crítica social, política actual, paro y corrupción.
- Autor Toni-Lluís Reyes
- Dirección Col·lectiva
- Intérpretes Miquel Gelabert, Eva Barceló i Toni-Lluís Reyes
- Diseño gráfico y espacio escénico Antoni Valls