Crítica de Enrique Guarrotxena
Valoración: 10
Time Takes The Time Time Takes es un espectáculo de danza en Barcelona de Guy Nader y María Campos. No sé si conocen esta canción del grupo tan famoso de los 80 The Police: Synchronicity porque de eso trató la función de ayer. Una sincronización perfecta, como las agujas de un reloj o un hipnótico péndulo. Harmonía, movimientos perfectamente compenetrados aparentemente sin esfuerzo: Synchronicity.
En la transcripción a castellano el título nos da una pista de lo que es este espectáculo de danza: el tiempo se toma el tiempo que el tiempo se toma. Con una banda sonora espectacular, que se mete dentro del espectador (y por supuesto de los bailarines), sin dar apenas tregua. Porque efectivamente el tiempo no nos da tregua jamás. No queda otra: Synchronicity.
A una velocidad vertiginosa, la obra como el paso del tiempo, nos atrapó a todos. No hay salida. Puesto que nadie tiene escapatoria, ¿qué mejor manera de afrontar el tiempo y nuestra efímera vida, que en una perfecta armonía dentro de nuestras posibilidades?
En definitiva, este espectáculo de danza de Barcelona es un maravilloso encadenamiento, mecánico pero fluido, como si se tratara de un reloj suizo. Pero todo lejos de tópicos al uso. Gran belleza, delicados engranajes. Perfecta compenetración que merece la pena vivir en directo.