Durante solo dos semanas, The Rocky Horror Show estará en Barcelona ofreciendo un espectáculo alucinante, divertido y de enorme calidad. No es solo un show musical: es una fiesta, un encuentro, una celebración que se repite cada noche en el teatro. Directamente, desde el West End de Londres llega esta producción a Barcelona en versión original subtitulada que, realmente, ¡es brutal!
The Rocky Horror Show, un espectáculo impresionante y divertido aterriza en Barcelona
The Rocky Horror Show es un musical de rock de Richard O’Brien que llega a nuestra ciudad, dentro de su gira europea. Y es que este musical celebra su 50 aniversario de éxito con esta gira que visitará diferentes ciudades de Europa, siendo Barcelona su única parada en el país. ¡Y menuda parada!
La historia es la ya conocida por todos y por todas: una pareja, recién prometida, sufre un problema con el coche y tiene que pedir ayuda. Para ello, acuden a un castillo tenebroso en el que solicitarán una llamada por teléfono. Pero en el castillo viven unos personajes muy particulares, liderados por Frank, una especie de Dr. Frankenstein y Drácula en versión travesti.
La trama es freak, alocada, sensual y muy divertida. Hay lugar para todo: para investigaciones científicas descabelladas, relaciones íntimas inesperadas e, incluso, ¡extraterrestres! Es una mezcla extraordinaria de diferentes temas que, sorprendentemente, encajan bien y te hacen reír, disfrutar y ALUCINAR.
Un musical de enorme calidad, con voces espectaculares y una coreografía muy bien trabajada
The Rocky Horror Show es un musical y un musical en mayúsculas. Las voces de los tres protagonistas, la pareja prometida y Frank, son impresionantes. Sobre todo, menciono la voz del actor que hace de Frank, tiene un torrente imponente, una fuerza y una nitidez que maravilla. Además, sabe potenciar perfectamente ese toque sensual, picante y atrevido propio de su personaje.
La coreografía está trabajada al milímetro, con momentos en los que la música se detiene en seco y todo aquel esperpento de personajes se quedan congelados y con una pose específica, tal y como si estuviéramos viendo una fotografía.
El vestuario, maquillaje y peinados también acaba de redondear este musical. Dibujan a los personajes, pero además le dan ese toque surrealista, propio de la fantasía y del juego. Todo ello, se complementa con una puesta en escena dividida en diferentes espacios y que parece hecha de juguete. Momentazo: el inicio del musical, cuando la pareja va dentro del coche y ve, a la lejanía, una torre que se convierte en un edificio siniestro.
La importancia del público en The Rocky Horror Show
Tengo que admitir que yo no sabía lo que iba a ver. The Rocky Horror Show es mucho más que un simple musical: es un movimiento cultural, una fiebre colectiva. El público acudió al teatro disfrazado, con pelucas, maquillados… Y desde el primer momento, tenían ganas de participar, de intervenir, de bailar y de reír.
Debo admitir que me EMOCIONÉ: ver a la gente tan entregada en un teatro, me hizo sentir ese poder que tiene la cultura y que tiene el arte. La gente bailaba, participaba en las coreografías y tenía ganas de fiesta y diversión. Al final, todo el público terminó de pie y siguiendo la coreo de «Time Warp». Inolvidable.
- Lo que más me gustó: la calidad del musical, voces y baile.
- Lo que menos me gustó: no se me ocurre nada. Fue una experiencia en todos los sentidos.
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