Los mejores libros de Roald Dahl -[IMPRESCINDIBLES]

¡Conoce los mejores libros de Roald Dahl! A veces la vida real supera la ficción y este es el caso del maravilloso cuentista Roald Dahl. Sus cuentos, tótems modernos de la cuentística infanto- juvenil, han conquistado al menos dos generaciones de corazones emocionados. Willy Wonka, Matilda y hasta los Gremlins han sido personajes entrañables nacidos de la prolífica imaginación del autor británico. En Espectáculos BCN te contamos todo sobre los mejores libros de Roald Dahl y su extraordinaria vida.

¿Cuáles son los mejores libros de Roald Dahl?

La increíble vida de Dahl le dio miles de motivos e inspiraciones para escribir las más entrañables historias de las que disfrutamos en nuestra infancia. Tanto como la suerte le sonrió le hizo morisquetas desagradables.

Muy pequeño, antes de cumplir los 5 años, perdió a su hermana mayor y a su padre en un lapso de dos semanas. Perdió también, ya mucho más adelante a dos amados hijos rompiéndole por completo el corazón e inspirándolo a participar en la investigación de diferentes enfermedades infantiles. Pero, las cosas buenas también llegaron a su vida en forma de afortunados incidentes, sobrevivió a la caída de un avión, perdió y recuperó la vista, y un largo etcétera de aventuras extraordinarias.

Mientras participaba activamente como piloto militar británico escribía sus historias, las publicaba y al poco tiempo se volvían clásicos. Vivió para disfrutar de su merecida fama, y se convirtió en el autor de los relatos indispensables de la cultura occidental moderna. Sigue leyendo y descubre los mejores libros de Roald Dahl.

James y el melocotón gigante (1961)

El primero de los libros infantiles que Dahl publicaría. Antes había publicado Los Gremlins, pero podría ser considerada más una historia de leyenda y no necesariamente una historia infantil. James debe mudarse con sus tías -ambas terribles e injustas- tras quedar huérfano. Un extraño le regala una bolsa llena de bolas mágicas con las que puede hacer que el melocotonero de su patio se haga enorme. Montado en uno de los gigantes melocotones empieza un viaje mágico con muchas aventuras.

Matilda (1988)

Una de las últimas historias publicadas, pero, también, uno de los mejores libros de Roald Dahl. Y, también, probablemente, el favorito de todos. Y es que, pocos son los que pueden resistirse a la graciosa y talentosa niñita. Matilda es una lectura para amar la lectura. Nos recuerda que la lectura en la infancia nos empodera, nos da herramientas y nutre el alma. Dahl dice que dos inspiraciones lo llevaron a crear Matilda. La primera, la hermosa biblioteca Great Missenden donde inició su camino como ávido lector. Y el personaje de Buckinghamshire, un odioso personaje de su vida, que inspiró al padre de Matilda.

Dos fabulosas versiones cinematográficas han adornado el universo de Matilda. La primera es un icono de las películas infantiles de finales del siglo XX, y el segundo recién estrenado como musical y que llego al corazón de la nueva generación y fue un golpe en la nostalgia.

Charlie y la fábrica de chocolate (1968)

Tomó la inspiración de un suceso de su infancia. Estudiando en una escuela privada aledaña a una fábrica de chocolate en Gales, Dahl y sus compañeros recibían mensualmente una caja con nuevos sabores de chocolate para servir de conejillos de indias. Dahl se propuso crear por sí mismo un sabor e impresionar al dueño de la fábrica. Nunca cuenta si lo logró o no, pero en la historia de Charlie Bucket se queda con la fábrica y con un nuevo y extravagante amigo, Willy Wonka.

Las dos versiones cinematográficas son geniales, y ambas conservan mucho del estilo narrativo de Dahl -algo excéntrico y oscuro-, personajes adorables y situaciones alocadas que enganchan a grandes y chicos. La historia de Wonka y Charlie tiene una poco conocida segunda parte Charlie y el ascensor de cristal, allí conocemos las aventuras en el espacio exterior de Charlie y su familia.

Los Gremlins (1943)

Mientras trabajaba como piloto para la Royal Air Force británica, Dahl se dio cuenta de que su amor por escribir era casi tan grande como volar, y decidió empezar a hacerlo de forma profesional. Escribió y publicó en un semanario Los Gremlins. La historia de estos monstruos devoradores y alocados no es pura invención de la imaginativa mente de Dahl, es una combinación entre su creatividad y una leyenda aria que corre entre los pilotos británicos, y que acusa a estos monstruos de atacar y boicotear aviones y vuelos. Se convirtió en uno de los mejores libros de Roald Dahl.

La versión cinematográfica de los 80 está basada libremente en estos monstruillos, pero no son los que originalmente Dahl construyó para su historia. En su momento, 1943, Disney quiso poseer los derechos y llevarla al cine, pero nunca se logró un acuerdo, aunque para el libro posteriormente publicado se aprovecharon los primeros bocetos realizados por los dibujantes de Disney.