¡Descubre las calas pequeñas de la Costa Brava más espectaculares! En Espectáculos BCN te llevamos a recorrer la Costa Brava y las pequeñas calas que la adornan. Un paseo precioso para que puedas maravillarte con la naturaleza que rodea nuestras costas. ¡Disfruta de la belleza natural! 😉
Descubre las calas pequeñas de la Costa Brava más bonitas
Algunas de las mejores cosas de la vida vienen en envases pequeños: los perfumes, las especias, y, algunas veces, las playas. Sí, no necesitas una extensión de arena y roca kilométrica para apreciar la belleza y majestuosidad del mar. De hecho, es probable que disfrutes más estando en estas cálidas y confortables calas llenas de vida.
Depende de la época del año, del clima y de la suerte el que puedas encontrarlas vacías. Pero, si por casualidad llegas a tener la fortuna de encontrarla libre, sentirás como se siente tener una isla privada y poder estar a tus anchas. A continuación, te contamos sobre algunas de las calas pequeñas de la Costa Brava más espectaculares.
Cala Culip– Cadaqués
Unos 15 metros de arena fina y oleaje silencioso y sereno bastan para enamorarte. Y como todo buen amor necesita algo de riesgo y esfuerzo, pues deberás caminar unos 8 kilómetros desde Cadaqués para poder llegar a esta pequeña y secreta cala. Las aguas claras y quietas son ideales para sumergirse y disfrutar de la increíble vida de las profundidades marinas.
Es una cala rodeada de leyendas, supersticiones e historia. Se cuenta que fue una de las grandes inspiraciones para la obra de Dalí, y, también, que en sus alrededores se han descubierto naufragios romanos y fenicios.
Cala S’Alguer– Palamós
Una pequeña cala rocosa que parece casi un escondrijo de los patios de las casas circundantes. Esta es una de las calas pequeñas de la Costa Brava más espectaculares y secretas. Aunque en los últimos años se ha popularizado bastante, sigue siendo un paraíso veraniego para quienes se atreven a hacer la larga caminata que les permite llegar.
La paz y la tranquilidad de la cala es una de sus mayores fortunas, y pocas veces podrás verla llena de gente o siquiera con habitantes dentro de las casas. Para acceder a ella debes llegar a Playa Castell en Palamós y recorrer el Camí de la Ronda, tras unos 20 o 30 minutos de caminata por las mejores vistas panorámicas de la costa, llegarás a Cala S´Alguer.
Platja Cala Estreta – Palamós
Otra de las calas a las que puedes acceder desde Playa Castell. Y, como a mayoría de las calas pequeñas y secretas de la Costa Brava, de difícil acceso. No hay forma de llegar en auto o de forma directa. La única opción es caminar unos 30 minutos desde la Playa Castell por una ruta paisajística que la une a Calella de Palafrugell. Al llegar te vas a encontrar con una cala pequeña, y partida a la mitad por un gran arrecife, ¡un verdadero espectáculo!
Cala Estreta es una de las más hermosas playas vírgenes de la región, y tiene un inmenso abanico de actividades para escoger. Puedes, además de tomar el sol y nadar, explorar los rincones y cuevas submarinas formadas por el arrecife, o los secretos de una costa pequeña pero rica de escondrijos naturales.
Sa Forcanera – Blanes
Sa Forcanera es otra de las mejores calas pequeñas de la Costa Brava. Una cala a la que puedes acceder solo desde el mar. Entre la playa de Santa Anna y la Cala Sant Francesc y bajo el largo acantilado que limita el convento de Blanes. Quienes osen visitarla tendrán que hacerlo por vía marítima. La mayoría llega en kayak. Pero vale absolutamente la pena el paseo, y es que una cala muy cerca de Barcelona pero desértica, paradisíaca y casi utópica.
Es ideal para quienes retomar la conexión natural y pasar una jornada en la que solo lo natural le rodee. Si buscas alejarte de la civilización y hacerte uno con la naturaleza, esta región tiene un collar de perlas escondidas a las que podrás acceder en barco o kayak.
Cala Prona – Port de la Selva
El típico paisaje de la zona se resume en esta pequeña cala: poca vegetación y grandes rocas grises. No vas a encontrar costa arenosa por ningún lado, pero sí una de las pequeñas calas de la Costa Brava más bellas y solitarias. Los 25 metros de roca que conforman la orilla de esta cala se ubican dentro del Parque Natural del Cap de Creus.
La ventaja de cala Prona es que es una de las calas más accesibles del listado, pues puedes ingresar bastante cerca en auto o barco. Cuenta con una pequeña casa refugio en el centro que la hace la locación perfecta para un cuento marino.
Cala d’Aigua Xèl·lida– Tamariu
La tríada del paisaje playero perfecto de la Costa Brava: aguas cristalinas, pinos y rocas. Muy cerca de Punta des Banc fue una de las primeras inspiraciones de Josep Pla para su Un viatge frustrat.
Sus 25 metros son una obra de arte viva en la que es posible sumergirse y respirar. Puedes hacer el Camí de Ronda desde Tamariu o en coche y hacer el sendero desde la calle Avi Xicu para llegar.