Nota: 5 sobre 10
Un escenario preparado para un viaje al más allá, una iluminación que te adentra en un mundo en el que lo oculto parece salir hacia afuera, una noche preparada para el misterio… En la Sala Muntaner se puede disfrutar de «Hypnos» un espectáculo de hipnosis y magia llevado a cabo por Luis Pardo.
El show empieza muy bien: un juego matemático, una lección sobre los mensajes subliminales en nuestra sociedad y trucos sencillos pero eficaces hacen que el espectador se adentre de una manera emocionante en Hypnos. Luis Pardo, con su labia, su manera de moverse y su presencia escénica consigue despertar esa inquietud hacia lo oculto que todo el mundo tiene. Sin embargo, los trucos que al principio emocionan terminan por hacerse obvios, insulsos y poco creíbles.
El error está en que Luis Pardo decide subir sobre escena a, aproximadamente, unas 10 personas sentadas en el público con la intención de hipnotizarlas a todas. Difícil, muy difícil. Y más aún si pretende hacerlo con un simple toque en la frente o en el hombro diciendo «Duerme». Pese a sus buenas intenciones, de las 10 personas que subieron sobre el escenario, como mucho una de ellas sintió el «efecto hipnotizador de Pardo», si puede llamársele así.
De todas formas, el espectáculo es divertido, ameno y sorprendente. Muchos trucos de los que Luis Pardo sube a escena consiguen que la gente termine con la boca abierta y preguntándose: ¿Cómo lo hace?. Y eso se merece un gran aplauso.
Entradas para el espectáculo de Luis Pardo en Barcelona
Se trata de una obra con una buena puesta en escena y una gran interpretación por parte del Sr. Pardo, y digo interpretación porque se trata de una auténtica estafa para el espectador que espere algo más allá de montar el paripé encima de un escenario. De 4 personas que fuimos y subimos al escenario, ni una sola fue imnotizada, y doy fe de que no fué por no intentarlo. El resultado, hacer el capullo encima del escenario fingiendo estar dormido mientras intentas concentrarte en lo que dice el Sr. Pardo, para que finalmente no suceda absolutamente «NADA». Sales con la mayor cara de imbécil que puedas imaginar, por haber intentado no dejar en ridiculo al susodicho encima del escenario Eso si, al salir te partes el culo cuando compruebas que nadie de tu grupo ha sentido el mínimo efecto de hypnosis.
Mi recomendación, coged la pasta y tomaros un cubata a salud del Sr. Pardo, que por muchas botas de cocodrilo que me gaste y atuendo de siniestro, no es más que un papanatas vende humo, incapaz de hipnotizar ni a kiko Rivera «en su día malo». PA TE TI CO
PD: Sin ánimo de despreciar el esfuerzo del actor pero es aberrante que se presente como un espectáculo de hipnosis….