Por Aina Ruiz
Las entradas para el concierto de Elefantes en Barcelona que dio el pasado día 19 en Luz de Gas estaban agotadas desde hacía semanas. La expectación por ver al grupo barcelonés en directo era muy grande y una multitud de fans se congregaron en esta pequeña y acogedora sala de Barcelona. “Nueve canciones de amor y una de esperanza”, último trabajo de la banda, el segundo desde su regreso en 2013, es un disco muy Elefantes. Luminoso, vital romántico, emotivo, bonito. Y en su presentación en directo no defraudaron a los fans de su ciudad.
Shuarma y los suyos irrumpieron en el escenario con “Lo más pequeño”, el cantante, impecablemente vestido para la ocasión con pajarita y americana, Jordi Ramiro en la batería, Julio Cascán en el bajo y Hugo Toscano en la guitarra. Desde el minuto cero no dejaron de brillar en el escenario, derrochando romanticismo, energía y alegría de vivir. Con “Volvió la luz” y “Que todo el mundo sepa que te quiero”, el público ya cantaba a pleno pulmón y el cantante ya se había deshecho de americana y pajarita.
Shuarma no estaba quieto ni un momento, moviéndose por el escenario con aires de gentleman, dando palmas, tocando la pandereta o la guitarra. Continuaron con la emotiva “En algún lugar”, se animaron con el flamenco versionando “”Oigo tus pasos” de Triana y nos invitaron a todos a cantar con ese maravilloso “Te quiero” de Jose Luis Perales que en su último trabajo cantan junto a Love of Lesbian y Sidonie. También pudimos disfrutar del tema de Jose Alfredo Jiménez “No me amenaces” y de “Duele” que en el disco cantan junto a su viejo amigo Bunbury.
En este concierto de Barcelona, Elefantes dejaron claro que gozan de muy buena salud y regalaron a su fiel público un directo intenso y cercano. El concierto se centró principalmente en el presente de la banda pero también hubo espacio para clásicos de su primera era discográfica como “Que yo no lo sabía”, “Azul” o “Somos nubes blancas” que dejaron felices y satisfechos a todos los asistentes. Ya de propina fueron “Al olvido” y “Piedad” y la banda se marchó en medio de una gran ovación.
