Lo que limita la esencia de un clásico de la literatura es difícil de definir. Pero, en resumidas cuentas, un clásico es una historia universal, cuyo tema, personajes o tramas son imperecederas. Además, un buen clásico deberá ser tan rico que con cada relectura puedas notar matices, detalles y referencias nuevas. Descubre la lista de libros clásicos imprescindibles de Espectáculos BCN y sumérgete en las mejores historias escritas.
Los mejores libros clásicos imprescindibles
Esta selección necesitó de mucho autocontrol porque podríamos hacer 200 artículos de libros clásicos y aun dejar libros buenos fuera. Sin embargo, estos son los primordiales, los títulos que tienes que leer al menos una vez en la vida.
Las mil y una noches. Anónimo
Una compilación de cuentos tradicionales del folclore del medio oriente. Escrita en la edad media, fue una pieza fundamental en la transición del oscurantismo a la edad de la razón. A través de la figura de Sherezade se introducen otros relatos populares en el Medio Oriente como Simbad y Aladino.
Don Quijote de la Mancha. Miguel de Cervantes
Don Quijote y Sancho son protagonistas de una de las aventuras más singulares y famosas del mundo. Muchas de las escenas descritas por Cervantes se han vuelto iconografías míticas de la imaginería popular. Don Quijote fue en su momento una obra disruptiva que se atrevió a burlarse de un género canónico de la literatura en ese momento, la novela de caballería. Sin duda, uno de los clásicos de la literatura española.
Orgullo y prejuicio. Jane Austen
La pluma de Austen es admirable, puede juntar critica social, humor y amor en un mismo dialogo. Los personajes de esta novela son icónicos y dieron forma a la estructura dramática de la novela romántica en adelante. De las escritoras victorianas, probablemente, sea la más emblemática, y esta la novela más amada de ese periodo.
El extranjero. Albert Camus
Camus cuenta con otro de los libros clásicos imprescindibles. Utilizó esta novela como un instrumento para demostrar dramáticamente los argumentos de su teoría del absurdo. La irreverencia del personaje principal deja un regusto a anarquía en la boca que no nos abandona al terminarla. La apatía de Meursault es un reflejo de una sociedad agotada de violentas pasiones.
El moderno Prometeo o Frankenstein. Mary Shelley
Uno de los libros de terror más famosos, pues su personaje ha sido la inspiración para cientos de relatos. Sin embargo, y a veces sin notarlo, esta historia nos hace confrontarnos con preguntas profundas y peligrosas para su época. La naturaleza de la vida y del alma, el papel del creador sobre su obra y la soledad son algunos tópicos que Mary Shelley nos obliga a reflexionar mientras seguimos la vida -y desgracias- del Moderno Prometeo.
Cumbres Borrascosas. Emily Brontë
Cumbres Borrascosas fue repudiada y ridiculizada cuando se publicó por su estructura, su violento discurso y oscuros personajes. Es un libro complejo que suele ser amado u odiado, sin tintas medias. Pero, innegablemente rompió paradigmas, y se atrevió a mostrar un amor sin idealizar que colinda con odio y venganza. Hay que leerlo con cabeza fría y valentía.
Moby Dick. Herman Melville
Moby Dick es otro de los libros clásicos imprescindibles. Nos cuenta sobre una expedición, no solo la que hace el Pequod para atrapar una ballena, sino la de Melville por entender la condición humana. En principio podría creerse que es una historia sencilla sobre pesca o incluso sobre obsesión. Pero, los temas que propone Moby Dick son tensos, hablan del poder, la venganza y lo excitable del espíritu humano.
Grandes esperanzas. Charles Dickens
La más grande novela de aprendizaje. Acompañamos a Pirrip desde la niñez hasta la adultez y deseamos verlo cumplir su sueño, ser un noble caballero. La narrativa de Dickens tiene una estructura tan moderna y adictiva que ha sido replicada en formatos como TV.
Crimen y castigo. Fiodor Dostoyevski
Dostoyevski podría tener la mitad de su bibliografía en este listado. La maestría y realismo con el que ahondaba en la humanidad, fortalezas y debilidades lo volvió un autor de culto. Sus escritos son un análisis psicológico y moral de la sociedad que contrastan su tendencia al existencialismo y su profunda religiosidad. Sin duda, uno de los libros imprescindibles que tienes que leer sí o sí.
Ana Karenina. León Tolstói
Tolstoi podría también tener varios libros imprescindibles de la literatura universal (lo admito, amo la literatura rusa) pero Ana Karenina es la cumbre de su elocuencia. Junto a Guerra y Paz es una de las novelas más trascendentes de la historia. La infidelidad de Ana, la protagonista, es la excusa para recorrer los valores fundamentales de la sociedad de la Rusia Imperial.
Junto a Madame Bovary de Flaubert fungen como un retrato de la figura femenina en la sociedad de la época. Salvando los distintos contextos geográficos e históricos, ambas novelas funcionan de forma similar, exponen y critican la realidad.
La señora Dalloway. Virgina Woolf
Seguimos a Clarissa Dalloway durante todo un día. La narrativa, casi soliloquio, nos permite conocer sus pensamientos y diatribas. Los preparativos de una gran fiesta sirven de telón para conocer, también, la organización social del periodo entre guerras. Comparte estilo y ritmo con Ulises de James Joyce del que hablaremos luego. Ambas parecen ralentizar la vida para poder permitirnos desmenuzar la conciencia humana, lo cotidiano y el tiempo. Sin duda, es otro de los libros que hay que leer de la literatura universal .
1984. George Orwell
1984 es otra de las novelas clásicas de la literatura universal. No tengo por qué mentir, también amo la distopia, por lo que me costó elegir un solo clásico del género. Pero, 1984, él que lo empezó todo, el libro que fundó el género literario como lo entendemos hoy, resultó electo. Orwell imaginó un mundo donde la humanidad estuviese totalmente manipulada por un poder opresor, el Gran Hermano.
Lo magnifico de una distopía no es solamente el mundo imaginario, sino la descripción psicológica de quienes viven en ese mundo. La distopia de 1984 nos obliga a cuestionarnos si realmente podríamos notar si es una tiranía lo que gobierna nuestra sociedad.
Hamlet. William Shakespeare
No podría haber una selección de clásicos sin Shakespeare. Casi todas sus obras se consideran clásicos porque fue todo un innovador en su época. Sin embargo, Hamlet es sobre todas la que desarrolla personajes y tramas más complejas y brillantes. Hamlet es un tratado de la virtud devenida en venganza y traición. La gigantesca cantidad de interpretaciones y alegorías que se pueden encontrar en el texto lo ha vuelto un tesoro cultural.
El retrato de Dorian Gray. Oscar Wilde
Un clásico del suspenso y del terror, pero con una premisa básica del comportamiento humano, el anhelo de permanecer. Dorian Gray es vanidoso, sí, pero el sentimiento que lo guía es la necesidad de permanecer y experimentar. Es una novela filosófica que expone la compulsiva necesidad de buscar la belleza y placer como fin último. Uno de los libros clásicos para adolescentes más aclamados y que suelen triunfar más entre los estudiantes.
La metamorfosis. Franz Kafka
La obra clásica del Absurdismo literario. Kafka pone en la piel de Gregorio Samsa una multitud de sentimientos y sensaciones de la existencia. Una ínfima existencia humana que vive por y para las responsabilidades impuestas por los cánones sociales, ese es Gregorio. Las interpretaciones de la trama de La metamorfosis son múltiples, sin embargo, todas coinciden en la exquisita construcción narrativa. Es una novela corta, se lee de un tirón, pero te dejará imágenes imperecederas.
Cien años de soledad. Gabriel García Márquez
La novela que comprime la historia y obra de una dinastía . El enrevesado árbol genealógico de la familia Buendía es muestra de las tramas y personajes laberínticos que García Márquez construyó. Una historia que se vuelve cíclica y ciclónica y destruye todo lo que creías saber de literatura. Es la esencia misma del realismo mágico y de cómo el misticismo se hace palpable en la realidad de Macondo.
La Ilíada, de Homero
¿Quién no ha escuchado de Troya y su caballo? Homero nos legó la obra clásica por excelencia, la ineludible, la Ilíada. Una epopeya que nos muestra la importancia del valor, la fuerza y la política para la sociedad griega. La visión de una humanidad arrastrada por el beneplácito de los dioses es el eje de la narrativa homérica. Sin embargo, Homero aprovecha de representar las relaciones en el Olimpo como caóticas y llevadas igual por política e intereses.
Los miserables. Víctor Hugo
Los textos de Víctor Hugo tienen la capacidad de presentarnos la dicotomía de la naturaleza humana en una misma trama. Los miserables nos confronta a lo peor de la tragedia humana, al dolor y la misera. Podemos pasar de la infamia a reconocer los poderosos caminos de la lucha y el amor en pocos capítulos. Es una de las obras más influyentes de la literatura y más versionadas en otros formatos artísticos.
La Divina comedia. Dante Alighieri
El viaje de nuestro héroe por reencontrarse con Beatrice le obliga a recorrer el infierno, el purgatorio y el cielo. Este poema, además, de una de las más hermosas historias de amor y redención es una revista de cotilleos políticos. Virgilio, poeta romano, te guía a través de los terribles círculos infernales y te cuenta las razones de las condenas. Decenas de personajes históricos y contemporáneos de Dante aparecen condenados al tormento eterno.
Sus personajes simbolizan la mayor de las premisas cristianas: el hombre proclive al pecado (Dante) que a través de la razón ( Virgilio) y la fe (Beatriz) consigue redimirse.
El Principito. Antoine de Saint-Exupéry
Es un clásico que se asume como literatura infantil, y, sin embargo, las enseñanzas del Principito son eternas y universales. La trama aborda temas tan complejos como la soledad y el propósito de la vida en un lenguaje sencillo. La transformación del pensamiento en la travesía de la niñez a la adultez es otro de los pilares narrativos. Y es que, El Principito nos permite recordar la forma sencilla y expedita en la que atendíamos nuestros sentimientos en la niñez, y como el extrañamiento de la adultez distorsiona la visión tenemos de la vida
Ulises. James Joyce
Una de las novelas cumbres del siglo XX. Un solo día de la vida de Leopold Bloom en las calles de Dublín le bastó a Joyce para reflejar la hazaña de vivir en la Europa de principios del siglo XX. La idea de Joyce fue, desde un principio, emular la Odisea de su admirado Homero, y de ahí el nombre. Finalmente lo logró, escribió, nada más y nada menos, que la gran epopeya moderna.
En busca del tiempo perdido. Marcel Proust
Terminamos esta lista de los libros clásicos imprescindibles con un clásico que no muchos pueden tolerar. Los 7 tomos que conforman la novela epitome de la literatura moderna pueden destruir tus ansias lectoras. Pero quienes lo logran conocen el valor de la perseverancia y el premio a la disciplina: disfrutar una obra maestra. Los acontecimientos, aunque importantes, no son la premisa fundamental de la historia; la memoria, sus trampas, sus victorias y sus conexiones empáticas son el motor de la novela.
En definitiva, la selección de los clásicos imprescindibles es algo subjetiva, cada lector podrá tener algunos títulos más o menos. ¿Qué te parece esta selección? ¡Cuéntanos qué otros libros clásicos imprescindibles nos recomiendas?